En el mes de octubre la iglesia Comunidad de Paz (COMPAZ), celebró sus 20 años de tener amor por la palabra de Dios.
En la nueva normalidad, la originalidad y calidad se hacen presentes, de manera tal que lanzaron un documental titulado “Reseña histórica, Identidad, propósito y destino”, cabe destacar que en el evento de lanzamiento y celebración realizada en sus instalaciones en San Salvador, mantuvieron el apego a las medidas de bioseguridad.
La iglesia COMPAZ nace un 08 de octubre del año 2000, en el inicio de un nuevo siglo. Nacen en la casa de la hermana Rosita de Pérez, con los miembros de su familia (5 eran los integrantes) así es como el pastor Vladimir Rivas inicia su llamado a servirle a Dios. “Aún recuerdo esa primera reunión familiar que sostuvimos en nuestra casa con mis padres, mis hermanas, siguiendo la visión que Dios había puesto en el pastor, sin saber y entender cuán grande era esa visión, tuve el privilegio de llevar los cantos, siendo la primera persona en ministrar la alabanza en Iglesia COMPAZ” expresó la Dra. Karla Pérez de Alvarenga.
El segundo lugar donde la iglesia continúo su ruta a convertirse en una de las iglesias de mayor trascendencia en El Salvador, fue la sala Cristal, “Tenía mucho miedo, no puedo decirlo de otra manera, empezar siempre duele, no sabíamos cómo hacerlo, recuerdo mis primeros sermones llenos de esperanza, llenos de euforia, revelaban la inexperiencia pero la pasión” describe el pastor fundador de Iglesia COMPAZ, Dr. Vladimir Rivas.
La primer “oveja” de la iglesia después de la familia Pérez, fue Marilú Escalante de Nolasco, “Si aquí hay lágrimas, si aquí hay personas restauradas, si aquí hay hogares restaurados por este ministerio es porque ellos (la familia pastoral) ya pagaron el precio”. Acotó Marilú.
«Mi esposo y yo trabajamos mucho en preparar el lugar, en preparar el ambiente espiritual, era emocionante ver a los niños de escuela dominical, solo eran 2, pero teníamos a una excelente maestra, mi hermana Maura Pérez” detalla la pastora fundadora, Esmeralda de Rivas.
Fui la primera maestra de escuela bíblica, lo que hoy conocemos como “Compazitos”, ver hacia atrás, ver que han pasado 20 años, a pesar de las pruebas que hemos pasado, puedo decir que como en sus inicios COMPAZ es un lugar donde las personas son restauradas,
Rodrigo Escalante es una de los primeros 2 niños que asistieron al culto en sala Cristal, hoy está casado y ha ido creciendo y viviendo todas las etapas de su vida de la mano con la guía espiritual que la congregación le brinda “Tengo 20 años de estar en COMPAZ, desde que comenzó, no tuve un padre presente a lo largo de mi vida, pero el pastor Vladimir ha sido un ejemplo claro de un padre y de la persona que yo quiero ser en mi futuro” señaló Escalante.
Rápidamente el lugar se llenó y tuvieron que moverse a un lugar con mayor capacidad y espacio, es así como se trasladan a la Colonia Satélite en el año 2002, Compaz es un refugio, un lugar donde las personas son restauradas, creo que hasta la fecha soy una de esas personas que ha sido transformada” pronunció Karina Herrera, quien recibió a Cristo en este nuevo lugar.
Aunque en este lugar (Colonia Satélite) estaban teniendo un crecimiento, por razones de seguridad tuvieron que buscar una nueva locación, con profundo amor el Dr. Teófilo Rivas (padre del pastor Vladimir Rivas) facilitó el templo de Iglesia de Dios El Paraíso, para que la pujante iglesia no perdiera su rumbo.
En este nuevo espacio, se suman a la visión personas que han desarrollado su liderazgo, como fue el Juan José Renderos y su familia, quienes hoy dirigen Iglesia COMPAZ sede San Marcos, “Como familia estábamos necesitados de un guía, de un mentor, de un pastor” reflexiono el pastor Renderos.
A pesar de ser una bendición esta ubicación para que la iglesia mantuviera su identidad y destino se hacía necesario reubicarse, es así como comienzan en la búsqueda constante de donde trasladarse, y llegan a rentar una casa en la 29 calle poniente de San Salvador, fue tal la alegría del cambio que realizaron una caravana desde San Ramón Mejicanos, donde estaban en ese momento hasta la 29 calle poniente que sería su nuevo lugar de adoración.
“Cada uno de estos fueron cruciales, cuando llegábamos al lugar veíamos el espacio las dimensiones, pero rápidamente El Señor lo llenaba y decíamos: este ya no es el lugar, hay que moverse a otro lugar” destaca la pastor Esmeralda de Rivas.
Radio Mesías 99.3 FM se convirtió en un pilar importante, Teresita y Manuel Montes, creyeron en el proyecto del pastor Vladimir Rivas, y comenzaron una relación que fortaleció mucho a Iglesia COMPAZ. “Quien tiene una palabra, lo tiene todo” fue de los slogan más sonados en la radio estación cristiana.
En el año 2006, motivados por el crecimiento, la oración y la fe, llegan al lugar donde se han consolidado y expandido de formas inimaginables, la Colonia Lisboa ha sido testigo del avance de Iglesia COMPAZ, un antiguo taller mecánico pasó a ser una casa de alfarero, un nido de águilas.
Uno de los elementos que ha caracterizado a Iglesia COMPAZ es la unidad familiar, impregnando su sello: “No hablamos de familia, vivimos en familia”. Principio que fue arraigado por el Dr. Teófilo Rivas, padre del pastor Vladimir Rivas, considerando que en la familia descansa la bendición de la iglesia.
Por su parte la Dra. Margarita de Rivas (Madre del pastor Vladimir Rivas) se caracteriza por ser una mujer de fe, y donde quiera que predica siempre pregona el principio que Dios es un Dios de milagros.
En el año 2019, el templo que construyeron en 2006 con tanto cariño, debían demolerlo, para dar paso a edificar sus nuevas y modernas instalaciones, que incluía un terreno contiguo que denominaron “Tierra Nueva”, propiedad por la que oraron 6 años continuos.
Sostienen uno de los programas más exitosos de desarrollo, en el cual fomentan 3 cosas en la vida de los niños: propósito, identidad y destino. El área juvenil es una extensión de lo que hacen con los niños, invierten en lo jóvenes por amor a ellos, “Siempre es hermoso ver cuando Dios toca a alguien, esa es mi vida, el día a día, ver como las personas son bendecidas, no hay nada más hermoso que eso” explica Isaac Rivas (Hijo de los pastores Esmeralda y Vladimir Rivas).
“Mi sueño siempre ha sido que la palabra que predico, pueda cambiar el corazón de la vida de las personas, pueda provocar transformación, ese es nuestro reto”. Concluyó el pastor Vladimir Rivas.
“Es un lugar donde podemos aprender, encontrar nuestro propósito e identidad, ver el amor de Dios en las personas, en la sonrisa, en la mirada de las personas que sirven en la iglesia” sostiene Vera Rivas (Hija de los pastores Esmeralda y Vladimir Rivas).
“Iglesia COMPAZ es el abrazo de Jesús para cada uno de los que asisten” remarcó la pastora Esmeralda de Rivas.
