Por July De Sosa / Ministerio Cristo Como Pastor (CCPAS)
El clima político que se vive en mi amada tierra en la cual surgen las bellezas del arte, refleja nubosidad entre las nuevas propuestas y las ya existentes. Tiempo caótico, que requiere de toda nuestra concentración y capacidad de razonamiento, para elegir como conviene a nuestros alcaldes y diputados. Considero que los cristianos además de ser llamados a orar por nuestros gobernantes, debemos pedir discernimiento divino para saber colocar el punto de equilibrio con nuestro “voto” basado en las posibles propuestas de los candidatos, y no, de manera emocional.
El Salvador, es considerado por muchos como un país, violento, sin embargo, a mi juicio tenemos la vocación para vivir en armonía el problema está en aquellos líderes que explotan el dolor y la frustración del pueblo, para sus fines establecidos políticamente, lo que considero acto de irresponsabilidad para con la patria, pero que lastimosamente muchos se “niegan a ver” y lo más lamentable es que esos líderes que incitan a la violencia encabezando actos arbitrarios, en un breve tiempo se retiran tranquilamente a sus residencias donde gozan de todo bien y recursos, y la mayoría de ellos fuera del país que les permitió cumplir su sueño. Razón por la cual considero injusto que la gente que lucha diariamente por su alimento y contar con lo más básico sea usada para sumar votos e ignorada cuando de cumplirles se trata.
El papel de la iglesia debe de ser espiritual pero también presencial en el bienestar del país. El apóstol Pedro dijo a Jesús “a quien iremos si solo tú tienes palabras de vida eterna” los hijos de Dios tenemos en su palabra escrita las palabras de vida eterna a las que Pedro se refirió. Por lo tanto, nuestra es la responsabilidad de guiar e invitar al pueblo a ejercer su voto racionalmente y no sentimentalmente.
El próximo 28 de febrero tenemos el compromiso de contribuir con nuestro voto al bienestar de nuestro amado país de El Salvador. Pero recuerda que debemos pedir dirección Divina y hacer uso de la razón para que nuestro voto sea de provecho.
DIOS UNION LIBERTAD.