Europa y los Estados Unidos se acercan a una inflación récord de cerca del 10%. Esto, comparado con un par de años en que ya se alarmaban los economistas con un índice inflacionario de cerca del 2 por ciento anual.
América Central, México y el Caribe, así como América del Sur se empinan en cifras desconocidas en los últimos 20 años.
¿Qué es lo que ha disparado los precios “al consumidor” a tanta velocidad y a un nivel tal alto?
El alto costo de la energía (llámese petróleo) por una parte (Y la OPEC dijo que recortaría la producción para “nivelar los precios del crudo) … la falta de piezas y repuestos para todo tipo de medio tecnológico, que venía de China y Taiwán, la escasez o simplemente carencia de todos los productos agrícolas que provenían de Rusia y Ucrania, y, ¡agreguémosle las políticas fiscales de todos los gobiernos, que comienzan a imprimir billetes, como si estuvieran a cargo de una fotocopiadora!
Japón, con una inflación del 3% ha decidido cortar sus importaciones en una cantidad apreciable para mantener su economía interna bajo control, al mismo tiempo que procura seguir vendiendo tecnologías y productos sofisticados al mundo.
Pero, el resto de nosotros no somos tan afortunados y, parece que tendremos que apretarnos el cinturón, una vez más, restringiendo incluso aquellas cosas que necesitamos ante salarios que simplemente no alcanzan para mantener nuestra propia economía casera.
Gran Bretaña aprendió en poco más de seis semanas que la idea de crear un “mini presupuesto” que consistía en reducir los impuestos no era viable, haciendo renunciar a la primera ministro Liz Truss y a su equipo de asesores.
Alemania, ha vuelto a comprar grandes cantidades de carbón para echar a andar esas centrales eléctricas ante la venida del invierno en el hemisferio norte, echando por tierra todos los discursos de Greta Thunberg, la joven sueca, y defensora del medio ambiente, que quería un planeta más limpio.
Y los economistas, convertidos hoy en los oráculos que nos anuncian que las cosas irán de mal en peor, nos dicen que debemos prepararnos para una recesión mundial, en que todos seremos afectados.
A lo mejor, este artículo llega cuando todos los problemas económicos del mundo ya se han resuelto y nuevamente vivimos como lo hacíamos antes… ojalá que me equivoque, porque de desastres y crisis ya estamos llenos, y necesitamos un respiro. Para nuestra salud física y mental. Así sea.
(guillermo.serrano@ideasyvoces.com)
