Por: Edwin Góngora
Este es el nombre de la campaña que el Movimiento de oración y Unidad Tomando mi Nación realizará este 5 y 6 de febrero y al que han sido invitados los pastores Ricardo y Patricia Rodríguez, del Centro Mundial de Avivamiento con sede Bogotá, Colombia.
La actividad está programada se realice en dos fases. El 5 de febrero será dirigida a pastores y lideres, mientras que el 6 está previsto que los pastores invitados realicen un servicio de milagros y sanidad.
El Pastor Mauricio Navas, quien preside el Movimiento Tomando mi Nación, explicó durante una entrevista realizada en Radio El Camino que el evento traerá una frescura de parte del Espíritu Santo a El Salvador.
“Debemos anhelar un ascenso en nuestra vida cristiana, pero es el espíritu de Dios que se encargará de levantarnos, de ascendernos”, manifestó el pastor Navas.
La palabra avivar agregó, viene precisamente de volver a la vida, no es una palabra difícil de describir, sino que es como volver a vivir”
El evento tendrá lugar en el Estadio Las Delicias, ubicado en Santa Tecla, departamento de La Libertad y se prevé asistan más de 50 mil personas.
El evento contará con el apoyo de las autoridades encargadas de la seguridad publica en el país, para lo cual el Pastor Navas informó que más de 200 agentes de la PNC, Gestores de transito y miembros del Cuerpo de Agentes Metropolitanos de Santa Tecla, prestaran servicio.
Así también señaló que se contará con 5 ambulancias completamente equipadas para brindar asistencia si fuera necesario.
El Pastor Mauricio Navas aseguró “Podemos esperar una palabra que llegue al corazón de parte de Dios, y no dudamos que los pastores Ricardo y su esposa serán usados para encender mas ese fuego espiritual que tanto estamos necesitando”.
El evento es propicio para que toda la familia asista y si en dado caso usted tiene un familiar con algún padecimiento, puede llevarlo, pues se tiene previsto dedicar un tiempo para que Dios obre con milagros.
Es que la mejor manera en la que puede vivir una nación es que cada uno de sus habitantes esté bajo el fuego, pero del espíritu de Dios.
