Por: Edwin Góngora
“Las flores y los reconocimientos no son para alguien que ya no está entre nosotros, ambas cosas se dan en vida”.
Así lo asegura El Presidente de la Asociación Internacional de Capellanes de Los Estados Unidos, Carlos Molina, que este fin de semana llegó al país junto a una comitiva, para entregar un reconocimiento al trabajo “pacificador” que por medio de su labor a realizado el Pastor General de Iglesia El Camino, Mauricio Navas.
Durante unos de los servicios del domingo, la congregación presencio como la Asociación de Capellanes homenajeo con un “Honores Causa” la destacada labor del pastor Navas en beneficio de El Salvador, a través de su labor y de la ejecución de dos proyectos de prevención de la violencia, “No Mataras” y “Tomando mi Nación”.
“Estamos muy honrados en reconocer la labor y la experiencia de una persona que sabemos es especial para la iglesia y El Salvador y por toda la misión que Dios ha puesto en él y ministerio que preside”. Destaco el Capellán Molina.
Y es que por primera vez esta Asociación llegó a El Salvado y entrega un reconocimiento de esta índole, fundamentado en el impacto y comentarios que el trabajo del Pastor Navas generó en Estados Unidos.
Las frases de reconocimiento para el Pastor Navas fueron surgiendo, así como los buenos deseos porque su misión compromiso y el legado continúen por mucho tiempo, ya que hay una nueva generación que lo apoya.
El pastor Navas inicio el proyecto de Iglesia El Camino en 1991, proyecto que nace firme hace 31 años, tiempo que ha liderado con Fe inquebrantable y un corazón dedicado al servicio de Dios, su comunidad y el país en general.
Los capellanes no dudan que el desempeño de su labor se fundamentó en lo que dice Hebreos 11: 1 “Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve”.
El haber impulsado proyectos como “No Mataras” y “Retomando mi Nación” habría contribuido significativamente a la paz y bienestar de la comunidad. Colocando en perspectiva lo que Mateo 5: 9 dice: “Bienaventurados los pacificadores, porque ellos serán llamados hijos de Dios”.
“Tenemos a un pacificador entre nosotros, al promover estos dos aspectos importantes, ya que los salvadoreños sabemos de dónde venimos y no dudamos que Dios lo levanto para ser un pacificador y llevar palabras de consuelo.” Dijo el encargado de Comunicaciones de la capellanía Brayan Martínez.
En el discurso de reconocimiento los capellanes externaron que no hay duda que el Pastor Navas ha dejado huellas en su caminar, con el compromiso, liderazgo, pasión, servicio y dedicación mostrada.
Por su parte el Pastor Mauricio Navas manifestó: “Con el corazón en la mano les digo muchas gracias por el reconocimiento a este servicio”.
Así mismo aprovecho la oportunidad para señalar que lo ocurrido en el país con el cese de la violencia, tuvo a la base el trabajo de muchas personas que confiaron en el poder de Dios.
“Lo que sucede o no sucede en un país, tiene que ver con lo que la iglesia hace y deja de hacer” aseveró.
En ese sentido fue enfático en mencionar, “si en este país tenemos paz y seguridad, es porque la iglesia se levantó, dejo las cuatro paredes y se fue a las calles a decirle a Dios, danos esta tierra”.
Así también menciono que los esfuerzos humanos se hicieron, y él lo sabe perfectamente. Afirmo.
“Sé de todos los esfuerzos hechos, pero nada logramos, hasta que la iglesia se levantó, entonces vino la paz y tranquilidad a nuestro bello país”. Sostuvo.
La entrega del reconocimiento la realizó el Capellán Mayor Rubén Vargas, quien pastorea la Capilla en Fort Jackson, donde se ubica la Iglesia Evangélica pentecostal del ejército de Los Estados Unidos.
Vargas es un militar retirado, y por primera vez visita a El Salvado, tras escuchar acerca del trabajo que el pastor Navas realiza, por lo que deseo conocerlo personalmente, bendecirlo y entregarle el Honoris Causa.
El Capellán Mayor Rubén Vargas externo, “lo que hoy vive El Salvador es el resultado de un Dios que escucha y también responde”.
Porque a su juicio “todo momento difícil vivido no ha sido en vano, pues la recompensa llega”.
