Nacimos el primer domingo de octubre de 1998 en la sala de una casa donde vivía (Residencial Santa Teresa, Santa Tecla), con un grupo de 7 adultos y 5 niños, con un poco de incertidumbre pero sabedores que Dios estaba con nosotros. Kemuel es una palabra hebrea que aparece en la biblia, cuyo significado es Levantados por Dios, y esta palabra nos ha sostenido hasta este día, porque quien es levantado por Dios nunca va a caer.
Ninguna iglesia debe sentirse una más, la razón de ser de una iglesia es ser relevante, nacimos en una etapa de inicio del nuevo siglo, cuando nuestra mayor responsabilidad era ser relevante, con un mensaje fresco, aplicado a toda persona de una manera útil, dinámica, y práctica. Los comienzos no son faciles, debimos enfrentar muchos desafíos, el más grande ha sido poder trascender.
Desde la apertura hemos sido respetuosos de todas las iglesias y denominaciones. Hemos sido la primera iglesia en establecernos en un hotel de manera permanente, alcanzando a personas que por ningún motivo asistían a una iglesia, pero si les agrada escuchar enseñanza o palabra desde la satisfacción de un hotel.
Tuvimos la oportunidad de establecer “Noches de Alabanza” con más de 100 ediciones a través de las cuales se pudo ser pioneros en la transformación del pensamiento de la alabanza y adoración en El Salvador, no eran eventos desarrollados con cantantes famosos solamente, sino más bien buscaba poder acercar a la iglesia local a una renovación de la alabanza, estableciendo un antes y un después, cuando la juventud asistía, apreciaba una nueva experiencia en adoración y se convertía en un agente de cambio para su entorno cristiano, a través del uso de ciertos instrumentos, nuevas técnicas musicales, y esto agradó a las congregaciones porque les hizo sentir una relación con Dios mucho más intensa.
Más allá de ser iglesia, Dios nos ha dado la oportunidad de ejecutar proyectos, como “Noches de alabanza”, ser herramientas para la realización de cruzadas como las del pastor Cash Luna, el evangelista Franklin Graham, el teleevangelista Benny Hinn entre otros. Jornadas de liderazgo y capacitación como el proyecto “Un millón de líderes” tanto para El Salvador y para Barcelona, España durante un periodo de 3 años. La Cumbre Global de Liderazgo, durante los primeros 6 años de producción, COICOM, impactando a una nueva generación de comunicadores y líderes cristianos. También Dios nos ha permitido incidir en distintas leyes de la Republica, ante los órganos de estado, aquellos temas que tienen que ver con la vida, con valores y principios, que deben inculcarse en las nuevas generaciones.
Se ha establecido una congregación capaz de interpretar los tiempos, ágil para reaccionar ante circunstancias de cualquier índole, todos llegan a su casa espiritual sin diferencias de ninguna naturaleza.
Quiero agradecer a mi esposa Ana Guadalupe de Hasbun, mis hijos, mi mamá, mis hermanas, administrativos, liderazgo, y a cada miembro de la iglesia, porque hemos aprendido juntos a no rendirnos, a saber que por difícil que sean los días, vendrán días mejores, días de expansión, días de paz, días de bonanza, y así ha sido. Nunca ha sido fácil, pero tampoco ha sido imposible, porque Dios todo lo hace posible.
Siempre hacemos un llamado a respetar la sana doctrina, no prestarnos a vientos y corrientes de doctrinas nuevas que se ven bonitas, suenan bonitas, pero al final son destructivas, mantenemos una doctrina sana, Cristocentrica, respetuosa de Dios y su palabra.
La bendición más grande que un ser humano puede tener es servir a Dios en la obra, el crecimiento lo da Él, uno siembra, otro riega, otro cosecha, pero el crecimiento es de Dios, todo pastor debe mantener cercanía con su congregación, el distanciamiento afecta mucho, vivimos en una época donde la gente está muy necesitada de Dios, acompañados del consejo y la palabra del pastor. Tanto Dios nos prospere, debemos mantener la humildad y sencillez, es importante que los logros ministeriales no nos envanezcan, mantengámonos siempre al pie de la cruz.
