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sábado, abril 20, 2024

¿Gozo o alegria? Parte II

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Por: Alex Navas

FILIPENSES 4,1-4
4 Regocijaos en el Señor siempre. Otra vez digo: !!Regocijaos!

Hemos estado considerando el gozo del Señor como un estabilizador para nuestras vidas en medio de circunstancias que roban nuestra paz , malas noticias, escasez, encierro, ansiedad, la economía, un diagnóstico desfavorable, el desánimo o la tristeza.
Aprendimos que la felicidad es cuando tu actitud se ajusta a las circunstancias que te rodean el gozo es cuando las circunstancias que te rodean se ajustan a nuestra fe.

Nuevamente el apóstol Pablo (conocido como el apóstol de los “sufrimientos) escribe desde una cárcel romana a poco tiempo de ser ejecutado lo siguiente:

Regocijaos en el Señor siempre. Otra vez digo: !!Regocijaos!
Filipenses 4:4

Pareciera que Pablo está escribiendo desde la playa , un crucero o en un momento de gran placer y tranquilidad , nada más alejado de eso. Esta a punto de morir y en manos de sus enemigos. La pregunta que surge es:

Es posible tener un gozo ininterrumpido en todo tiempo?

La verdad no, no al menos basado en un sentimiento, y es que el versículo no es un llamado a un sentimiento más bien es un llamado a una decisión y una confianza en que Dios es real, está en control , y nos ama. El apóstol Pablo levantó estabilizadores, un sistema de creencias que lo mantenían firme en los días más oscuros de su vida.

Veamos otro de esos momentos difíciles en la vida del apóstol Pablo junto a Silas en Filipos

“Después de haberles azotado mucho, los echaron en la cárcel, mandando al carcelero que los guardase con seguridad. El cual, recibido este mandato, los metió en el calabozo de más adentro, y les aseguró los pies en el cepo. Pero a medianoche, orando Pablo y Silas, cantaban himnos a Dios; y los presos los oían. Entonces sobrevino de repente un gran terremoto, de tal manera que los cimientos de la cárcel se sacudían; y al instante se abrieron todas las puertas, y las cadenas de todos se soltaron.”
Hechos 16:23-26

• La adoración de Pablo y Silas no venía de la felicidad , su canto provenía de algo más profundo y era el gozo del Señor.

Y ese canto provocó que las circunstancias adversas se ajustaran al gozo de su corazón, Dios cambió el escenario de derrota en un escenario de victoria y libertad.

Se puede estar siempre gozosos? La respuesta es si, pero sólo en El Señor mediante un sistema de creencias fundamentado en el carácter de un Dios fiel.

Por lo que la felicidad es un estado de ánimo pero el gozo es un estilo de vida.

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