“Si pagas mal por bien, el mal nunca se irá de tu casa.” Proverbios 17.13
¿Quién está listo para enfrentar males todos los días de su vida? Todos nos preparamos para que nos vaya bien en la vida a nosotros y a los nuestros.
Pero hay un elemento que cambia esa dinámica y es cuando decidimos pagar mal por bien. En la Biblia tenemos varias historias registradas describiendo esta dinámica, una de ellas es la de Saúl y David. David le hizo un bien a Saúl cuando mató al gigante, pero Saúl le pagó mal por celos y envidia aún procurando la muerte
de quién le había hecho bien a él, a su familia y a la nación entera. El mal no se fue de la casa de Saúl hasta el día de su muerte. Por ellos somos desafiados a ir más allá.
Paguemos bien por bien pero también aprendamos a pagar bien por mal.
Tiempo en Familia con Sabiduría en Acción.