Muchas son las preguntas que la gente de hoy se hace con respecto a las vacunas. Todas ellas, no solo contra el virus moderno del covid-19, sino contra muchas otras plagas y enfermedades que se han cobrado la vida de proponentes de las vacunas y de sus detractores.
¿Fueron efectivas –en su tiempo- la vacunas que se utilizaron para erradicar, el sarampión, la tos ferina, la tuberculosis, el herpes zósters, (“El herpes zóster1 es una enfermedad producida por una reactivación del virus latente varicela-zóster, que afecta a los nervios periféricos —neuropatía gangliorradicular—2 y a la piel, donde puede producir pequeñas ampollas dolorosas en forma de anillo agrupadas a lo largo de un dermatoma. Coloquialmente, es conocido como culebrilla, culebrina o culebrón. En algunas zonas del Mediterráneo, como España, Italia y Malta, también se le denomina «fuego de San Antonio»” (Fuente: wikipedia).
Nosotros creemos que sí, que son efectivas y que todo aquel que pueda, debe vacunarse, ahora contra la rápida infección o re-infección del covid-19. Con su variante “delta” ahora, el covid-19 amenaza a todo el mundo. Sin embargo, hablamos ahora de una tercera dosis para “reforzar” el sistema defensivo…
¿Hay mucho dinero envuelto en esta aplicación de dosis y refuerzo de dosis? ¿Manipulación de los gobiernos para llegar al final a un control de la sociedad? Porque los principales documentos científicos dicen ahora que se necesita un “búster” o refuerzo, que, en la práctica, es una nueva dosis de las mismas vacunas aplicadas antes. Y todo esto, ante el retraso de algunas vacunas programadas para este mes de Septiembre.
El Dr. Anthony Fauci, el asesor médico del Presidente Biden de los Estados Unidos dijo: «Sin embargo, cuando miras los datos israelíes, y están aproximadamente un mes por delante de nosotros en todos los aspectos de esto (vacunas, refuerzos, etc.), los datos de los estudios israelíes indican que hay un disminución de la protección contra la infección y una indiscutible disminución de la protección contra la hospitalización».
Fauci dijo que la buena noticia es que los datos de Israel muestran que las dosis de refuerzo ofrecen una protección «profunda» contra la infección y la hospitalización.
«Es importante destacar que sus datos también muestran que cuando se administran esos refuerzos, se reconstituye, a un nivel aún más alto que antes, la protección contra infecciones y hospitalizaciones», dijo Fauci. «Los refuerzos realmente aumentan la respuesta muy, muy alta, y esperamos que esa respuesta sea duradera» (CNN).
Los científicos del mundo corren para tener una respuesta pronta ante los que se infectan, aquellos que requieren de hospitalización y una maratón que se pierde cuando alguien muere.
No se si mi ejemplo sirva para algo, pero después de las dos dosis aplicadas a través de mi brazo, estoy dispuesto a ponerme todas la dosis de refuerzo que sean necesarias. Para evitar contagiar a otros, para no contagiarme yo, y, para no ir a parar a un hospital.
Suena un poco egoísta, ¿verdad? Y a lo mejor lo es, pero también creo que la evidencia científica ya ha sido puesta sobre la mesa para que cada uno tome la decisión correcta. Después de todo se trata de defender la vida: la tuya, la mía y la de aquellos con quienes compartimos hogar, escuela o lugar de trabajo. Es ayuda al prójimo porque así demostramos que estamos haciendo lo que manda la fraternidad entre los seres humanos.
(guillermo.serrano@ideasyvoces.com)