José Andrés, ¿por qué crees que la política ha adquirido una imagen tan negativa en la mente de las personas?
Lamentablemente la política ha perdido credibilidad en los ojos del ciudadano promedio. Esto se debe a una serie de factores, como los continuos casos de defraudación de fondos públicos, la falta de transparencia, rendición de cuentas y prácticas como el nepotismo que se practicó por más de 20 años, pero, en lugar de desencantarnos, deberíamos reflexionar sobre cómo podemos involucrarnos para luchar por mejorar la forma de hacer política donde debemos llegar a servir a la población y no servirnos de ella.
¿Qué te motivó a involucrarte en la política?
El espíritu de servicio inculcado por mis padres, ellos me enseñaron principios y valores donde principalmente debemos honrar a DIOS sirviendo al prójimo y es por eso que continué con ese legado, visitando comunidades, diferentes sectores de la sociedad como los hermanos emprendedores, trabajadores por cuenta propia, pequeños y medianos agricultores que hoy por hoy siguen y seguirán siendo por los próximos años la mayor fuente generadora de empleos y mayores dinamizadores de la economía nacional, en su gran mayoría mujeres madres solteras y pilares de hogar, que no buscan privilegios sino mejores condiciones y oportunidades para superarse, he ido aprendiendo con ellos y tratando de construir alternativas de solución a sus necesidades, ellos representan la famosa y verdadera fábrica de empleos que tantos políticos mencionaron pero poco o nada hicieron por ayudarles a mejorar sus condiciones construyendo con ellos verdaderas políticas públicas que les ayuden a superarse y realizar sus sueños, ellos representan nuestro talento humano y recurso más valioso para sacar a nuestro país adelante, no deben buscar emigrar a otros países (esto ha causado mucha desintegración familiar), por años han estado en el abandono sufriendo por parte de las autoridades municipales que han pasado por diferentes gobiernos municipales y ninguno atendía sus necesidades y nos dimos cuenta que teníamos algo en común, estábamos desencantados y decepcionados con los políticos que solo se acercaban a la población en época de campaña a pedir el voto y pasadas las elecciones brillaban por su ausencia y en las comunidades solo quedaban las promesas mas no las obras. Fue entonces que pensé tengo que involucrarme para que existan cambios y en el 2014 tomé el reto y me lance como candidato alcalde por Mejicanos, un reto grande por que existía una gran cantidad de problemas en el municipio, pero de los problemas vimos oportunidades para demostrar que podíamos hacer la diferencia, que la política es servicio y no buscar servirse de ella.
En ese sentido, ¿qué deberíamos considerar para dar nuestro respaldo político a un candidato?
Primero y, ante todo, debemos buscar políticos que promuevan la dignidad de las personas, la justicia social y el bien común. Esto debería ser nuestro norte. Al elegir a nuestros representantes, debemos evaluar si practican principios y valores que nos identifican como cristianos como personas temerosas de DIOS que practiquen la justicia, la solidaridad y demuestren con sus testimonios de vida sus acciones, obras y velen por el bien común de la sociedad, estas deben ser parte de sus características principales.
Mencionaste la importancia de la justicia. ¿Qué opinas sobre los modelos políticos predominantes en el mundo, como el populismo y el liberalismo?
Es esencial entender que ni el populismo ni el liberalismo son la solución. Tanto el populismo como el liberalismo pueden dar cabida al desprecio de los más vulnerables.
Debemos buscar un equilibrio que asegure el bienestar de todos los ciudadanos, especialmente los más necesitados.
¿A lo largo de tu trayectoria en la política has sido objeto de crítica y confrontaciones por tus creencias religiosas?
Claro que si en varias ocasiones, pero esas críticas me impulsan mucho más a seguir trabajando por mejorar las condiciones de la población, esas críticas no me van a detener para seguir apoyando a los más desprotegidos. y en cuanto a las confrontaciones, como lo dice Mateo 5:9; <Bienaventurados los pacificadores, porque ellos serán llamados hijos de Dios.> todo lo tomo con la mejor aptitud y me impulsa a trabajar más por la justicia social, por la defensa de la vida, la familia, la clase trabajadora y buscar siempre la resolución pacífica de los conflictos políticos, sociales
¿Qué mensaje puedes darle a la Iglesia Cristiana en El Salvador?
La Iglesia Cristiana en El Salvador debe unirse más, puede influir en la creación de políticas públicas que protejan los valores que compartimos. Dado que los cristianos evangélicos representamos más del 52% de la población, tenemos una oportunidad histórica para influir en políticas que protejan la familia, la niñez, las personas adultas mayores y con discapacidad, y erradiquen la violencia de género. Estos deben ser nuestros primeros pasos para una participación activa y efectiva.
¿En qué consideras que la Iglesia Cristiana debería incidir?
Después de abordar los temas sociales, la Iglesia debe trabajar en la generación de transformaciones en asuntos económicos, laborales, ambientales y de gestión pública. La política es un servicio hacia los más vulnerables y una herramienta para alcanzar la plena dignidad de la persona humana. Buscamos el bien común en todos los aspectos de la sociedad para lograr una verdadera justicia social.
Finalmente, ¿cómo defines la política en una frase?
La política es servicio, el bien común en todos los campos de la sociedad y una verdadera justicia social.
José Andrés Hernández brinda una perspectiva sobre la importancia de integrar los principios y valores cristianos en la política para construir un futuro más justo y digno. Su llamado a la acción es un recordatorio que cada uno tiene un papel que desempeñar en la transformación de la política y la sociedad.
