Por: Edwin Góngora
Uno de los gozos más grandes que puede tener un cristiano, es indiscutiblemente llevar a alguien a Cristo. Presentarle ese maravilloso proyecto que restaura y bendecirá su vida.
Amparado en este principio, el Pastor General de Iglesia COMPAZ, Vladimir Rivas a diseñado un proyecto denominado: “Uno gana uno”, el cual pretende que al término del año cada miembro de la iglesia haya compartido de su fe en Jesús con otras personas y haberlas ganado para Cristo a través de la confesión de la oración de fe.
Pero la labor no termina ahí, luego de haber evangelizado, el trabajo siguiente es ser un discipulador personal de quien se ganó a Cristo por un periodo de 3 a 4 semanas.
“El deseo de mi corazón es el que tiene Dios, él ama las almas, quiere verlas en su reino, quiere verlas en su redil como pastor de pastores y también creo que hoy en día las personas, los evangélicos, están muy distraídos y pensar en otro les va a ayudar mentalmente, espiritualmente, a ocuparse en la necesidad de orar por otro, visitarlo, dedicarle tiempo, preparar material para otro, les va a hacer sentir muy especiales”, señala el Pastor Vladimir Rivas.
Así también indica que este proyecto es romper con el “yo mismo”, cuando nos dedicamos a bendecir a otros, Dios nos bendice a nosotros.
Uno gana uno, fue presentado este martes 9 de enero al liderazgo que conforman los grupos de células y en los próximos días se compartirá con toda la congregación, de tal manera la iglesia se involucre.
Esta labor contará con un apoyo bibliográfico que el pastor Vladimir a elaborado, el cual consta de 4 clases que el discipulador tendrá de apoyo, fundamentados estrictamente en la palabra de Dios.
Para Ministerios Internacional COMPAZ esta labor es novedosa ya que desde su nacimiento el evangelismo se ha manejado a través de células, plataformas en redes sociales y medios de comunicación. Sin embargo, hoy se busca que la iglesia se ponga a trabajar personalmente, sobre todo el liderazgo.